Según todos los informes el precio de la vivienda desde los máximos de 2007 ha descendido un 19,5%. Según la tasadora TINSA.
Esto está muy lejos de creer lo que popularmente se dice, que hemos perdido un valor patrimonial del 30 o 35% en el valor de nuestras viviendas.
Otros medios afirman, que el precio de la vivienda no ha tocado suelo y tienen razón porque solo ha bajado al ritmo de 4,8% anual desde el comienzo de la crisis.
Reconforta ver, que aún, la bajada no nos ha hecho tan pobres como pensábamos. Solo faltaría adoptar medidas para que el crédito fluya con naturalidad para evitar que todo el parque inmobiliario se desmorone.
El año se subió el IVA (del 7% al 8%) que grava la compra de vivienda nueva También se eliminó la desgravación fiscal para las rentas superiores a los 24.107,2 euros, lo que provocó grandes prisas y obtener beneficios de ello.
Ahora nos enfrentamos a la subida del Euribor ya que la inflación aumenta y se debe enfriar la economía. Subirán por tanto las hipotecas. Parece claro que, nos ha cogido con el paso cambiado. Las medidas tomadas no han surtido efecto.
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